S01 E29
Cometí una aberración. Va capaz exagero. Compré el libro El loco, de Juan Luis González. Sobre justamente el loco que competirá contra Sergio Tomás Massa en el balotaje del próximo diecinueve.
Lo compré porque no lo pude piratear. Al libro El arribista del poder de Genoud, sí lo bajé por Telegram y al Kindle derecho sin pagar un peso. Pero a El loco lo tuve que comprar, era así, no quedaba otra, y ahora que lo pienso son las leyes del mercado. Las malditas leyes del mercado. Pero algo me movilizaba más.
Primero me pasaron el podcast Sin control. El universo de Javier Milei (voten a Massa, voten a Massa, voten a Massa, voten a Massa, voten a Massa) que está basado en el libro y me picó el bichito de leer la bio, que es un género en el que me gusta sumergirme.
Y segundo quiero entender. Quiero entender por qué mi mamá lo va a votar. Por qué Lucas, un amigo de la infancia, que en su vida habló de política, el otro día compartió un reel de Villaruel y puso “para que entiendan los cabeza de termo” por qué me puso triste ver a Lucas postear eso. Por qué. Por qué. Por qué.
El otro día le mandé un link a mi vieja del último Pero entonces, de Nico Guthmann. El mensaje fue respetuoso. Decía –hola ma yo sé que vas a votar al que te jedi, respeto tu voto, pero mirá este video si tenés ganas y eso-. Me contestó con un audio de tres minutos diciéndome que me quedé tranquilo que va a ganar Massa, que este país va a seguir siendo una porquería, que va seguir gente buscando qué comer en los conteiner, pero que ella iba a votar al Loco porque quería un cambio, después siguió otro audio donde me decía que había visto a través de un video a nuestro futuro presidente Massa tomando cocaína. No me dio para contestarle. Vi que ese video también pasaba por whatsapp entre mis compañeros de trabajo. Se ve tan claramente que está hecho con IA, por dios??♂️.
Me pone muy mal pelearme con mi vieja por política. Por eso cada semana que voy a visitarla, trato de esquivar el tema, o le digo claramente, -no hablemos de eso ma, porque vamos a pelear-. El colorado Ramos decía que los gorilas aprendieron a odiar de chiquitos a Perón porque sus madres lo puteaban mientras les preparaba la comida en la cocina. En mi casa sería todo al revés. Mami se volvió anti de grande. No recuerdo ni un solo comentario en mi infancia referido a la política entre mis padres.
Quiero entender todo esto que está pasando. Quiero entender también por qué el otro día cuando fuimos con Manu a la facultad de trabajo social a ver el docu Al borde, de César González no había casi nadie, diez personas. Y cuando volvimos caminando por Echagüe vimos a gente en los contenedores y a unos linyeras tirados en los palier de los departamentos por todo 25 de mayo. Como bien me dice mi vieja. Que vive en San Agustín y que dice que le viven manguiando comida hasta cuatro o cinco veces por día. Que ella les explica con ironía que ahora con Massa va a cambiar todo, porque si la gente lo votó, es porque estamos bien y esas cosas.
Quiero entender. Hasta me pregunto ¿tendrá razón mi vieja? Soy un pelotudo que lee y no ve la realidad. Que va a ver películas, que consume arte, que puede comprar libros (hasta sobre personajes que le caen horriblemente mal) ¿Me volví un pogre culposo?¿Un burgués estúpido lleno de teoría? ¿Me coptó la batalla cultural marxista? Naaaaaaaaaaaaaaaaa
Después se me pasa. Se me pasa cuando pienso que tengo que laburar ocho horas por día con un franco semanal en una empresa privada, disfrazado con un uniforme y mi nombre colgado de un pin en la camisa. Para después mirar con orgullo que los descuentos del 11% (pequeño aporte) de mi salario en blanco va a parar a muchos argentinos. Porque creo en el estado, en esta forma de repartirla. Creo en la organización de una sociedad de este tipo. Donde los que todavía tenemos fuerza de trabajo (tampoco es que levantó bolsas en el puerto) le damos una mano a los que llegan al final de sus vidas y que la traten de pasar medianamente bien. Mi mamá siendo jubilada conoció muchas provincias en estos últimos años, en sus viajes con sus hermanos y amigos. Eso me pone felíz.
Y ojalá que el estado ordene más la situación para que todos, sobre todo los más jóvenes, puedan obtener su primer empleo de calidad. Porque también no hay que dejar de exigirle nunca al peronismo que vuelva a sus raíces, a lo que lo hicieron el movimiento político más lindo del mundo. El que tiene más mística.
Quiero frenar acá un toque. Cuando hablo con algunos y les digo que estoy leyendo la biografía del loco. Me miran mal. Y me dicen que mientras más bola, más lo nombrás, le doy más importancia. Pero al loco no lo nombro y además les digo que terminé de leer la de Sergio Tomás Massa y escribí todo un episodio sobre eso (ver S01 E27). Sumado a que es una biografía en donde le saca la careta y lo desnuda por completo. La de Massa es bastante neutral, Genoud creo que es radicheta. Pero bueno necesitaba leer las dos antes del balotaje. Para escribir algo acá para el diario del miércoles.
La biografía es no autorizada voy por la mitad. Me atrapa, me consume. No me entran en la cabeza algunas cosas. Cómo cambia todo. Antes un político tenía que perder elecciones, panquequear muchísimo, discutir sus ideales, poner en práctica la dinámica de las contradicciones durante mínimo treinta años. Ahora este loco aparece en un canal de tv en 2015 por primera vez y ocho años después está a la misma altura que un político de raza, con trayectoria, quizás jugándose, el mano a mano, más importante de los últimos cuarenta años de este país.
¿Qué fue lo que pasó en el medio? Nada más ni nada menos que una pandemia. Hay teorías que dicen que la franja etaria de pibes que nacieron en dos mil diecisiete y que llegan ahora a los dieciséis, aptos para votar, son su núcleo más duro. Fueron los más golpeados por el encierro de la pandemia. Odian al estado que les robó sus años más hermosos. También hay que entender esto.
Cuando a Manu le cuento lo que estoy escribiendo me dice -cuidado con lo que escribís- ; -que lo lea Lucho antes que lo publiquemos-
Quiero entender que es lo que nos hace pensar que cualquier mínimo detalle podría cambiar el curso del destino del país de manera incorrecta. Y yo tuviera la culpa. Qué nos hace tener ese miedo. De no escribir, de no pensar el fenómeno, de creer que no está pasando.
Qué me hace pensar que si repito las mismas acciones que hice en las últimas elecciones, el resultado se repetirá. Trato de pensar exactamente lo que hice la noche previa a la victoria que nos dio un respiro a todos los peronistas. Que hizo que el dólar no se fuera a la mierda. Todo eso.
Qué me hace ser cabulero. Por qué todos estamos así. Pensando en lo peor o queriendo no pensar. Por qué no asumimos como sociedad el momento histórico donde nos pone el suelo de nuestra patria, con valentía, fe y esperanza. Si no nos ganan ellos cuando caemos vulnerables en su redes tejidas de odio y terror.
Trato de entender cómo llegamos a esto. Mi mente no para de pensar. Siento que es una semana muy, no sé, surrealista. Con la gente que hablo está toda preocupada. Cómo si estuviéramos aguardando un tsunami.
Pero escribir me sirve. Además esto tampoco es que lo leen muchos. Es un diario para mí que lo comparto. Quiero que quede el registro de cómo viví esta semana donde la historia nos pone de nuevo en un punto límite. Cómo el hecho político total nos mueve las estanterías de nuestras cómodas alacenas. Toda la calle habla de lo que va a suceder dentro de exactamente siete días.
Hoy a las 21 hs es el debate presidencial. Toda la Argentina estará otra vez frente a la TV pero en este caso no va a ser como la final contra Francia. La audiencia será casi la misma, la ansiedad la misma, pero no todos queremos el mismo resultado, qué bajón.
Hago una pausa acá. Es domingo a la mañana, salgo a la calle a caminar, no hay casi gente. Mucho viento en el litoral. A la mañana temprano hubo tormenta, después salió el sol. Se me viene a la cabeza la frase de Cardozo, el guardia de seguridad que trabaja con nosotros, que el otro día me dijo -quedate tranquilo que ganamos, pero por un pasito de bebé-.
Sigo caminando por una ciudad vacía. La mañana previa al debate presidencial. Escucho por Spotify el último Crisis en el aire. Mario Santucho larga una frase que le dijo un funcionario en la semana “ellos ganaron el primer tiempo, nosotros ganamos el segundo y ahora vamos a penales” después tira dos más que me ayudan a pensar “Massa no puede ganar una elección (porque la gestión de gobierno es muy mala) pero Milei sí puede perderla” otra: “pierde el que genera más rechazo”.
De todas maneras cualquier charla de política que se da en este país termina así: vamos a ver qué pasa.
Pongo música mejor. Me abstraigo un poco de todo. Estoy quemado de tanto leer, pensar, analizar y charlar con amigos o gente.
Mejor que lo diga el pity “al escapar físicamente los intoxicados se refugian en la intoxizada, para crear nuevos sonidos, ocultar sus cuerpos, carrocerías, y por segunda vez (la primera vez habrá sido en el balotaje contra Macri?a los pibes de mi generación les hablo) escapar mentalmente del planeta (Argentina).
Domingo dos de la tarde un posteo de alguien me hace retroceder con cuestiones básicas, casi elementales de etimología. Que no llamemos loco, demente, anormal a alguien que justamente tiene todos los patitos en fila y los dólares también. Que transpira venganza. Que por poder puede llegar a hacer cualquiera. Me retracto acá de las veces que usé estas palabras para referirme al innombrable personaje, perverso, que sabe muy bien lo que está haciendo y con los bueyes que ara y se junta para hacer sus atrocidades contra el pueblo. Pido disculpas y aprendo con ellos, con la comunidad demente ❤️
El posteo era este:
Pero me estoy dando cuenta que no escribo nada sobre la biografía del porfiado este. Pero qué puedo decir. Que fueron un conjunto de cosas las que dieron nacimiento a este monstruo. El giro de la ultraderecha en el mundo, la relación con su único jefe Eduardo Eurnekián que lo usa como espada para liquidar a Macri, después que éste le quiso mejicanear la concesión de Aeroparque y Ezeiza cuando era presidente. El rating que generó en América TV (17% de las acciones son del armenio Eunekián) a través de la amistad con Fantino que se jacta siempre de haberlo descubierto. Que la basura se va alimentando del odio y de la rabia del pueblo destruido por una inflación que no para de subir desde hace rato. Que sea hace el anti casta pero dejó tirados a sus militantes más fieles y humildes, gente de a pie provinciana, sin experiencia en política ni recursos, que se pagaban de su bolsillo los viajes para militarlo y ayudar a fiscalizar.
Que los traicionó justo echándolos del partido de manera facista o sea nada de libertad, para llenar de la peor casta con olor a mierda que hay en la política. Que contrató a los muñecos de Jurassic Park para filmar su panic show.
Que siempre terminamos, y ojalá que no, que está vez no, siendo víctimas de estos personajes outsiders y fracasados por maltratos en sus infancia por padres aún más corruptos que sus engendros. Qué mal hace la gente que no puede ser feliz la re mil mierda. Qué ganas de llorar. Por qué no se bancan ser fracasados como la mayoría y no usan de trapo a todo un pueblo para limpiar sus daños psíquicos y falta de amor que vienen arrastrando desde chicos.
En pocas palabras: por qué no se hacen cargo y se bancan convivir con su mierda como todo el mundo. Dato importante el nefasto este dejó de hacer terapia en la pandemia, quedó solo y abandonado y sufrió la muerte de un perro que lo acercó al mundo del esoterismo. Igual me estoy dando cuenta que la bio me irrita. Que lo estoy odiando demasiado, pobre. Quizás sea mejor tenerle lástima y hacer justamente lo que el Diegote no nos recomendó que hagamos con nadie. Ni ganas de seguir describiendo a este personaje. Que encima se lo van a comer desde adentro sus mismos secuaces.
La Argentina nunca termina de parir estos entreguistas. Desde Rivadavia para acá.
Mejor transcribir cita textual de Juan Luis González que lo explica perfecto acá, mucho mejor:
“Javier Milei es muchas cosas y tiene muchas caras. Es el niño que nunca recibió amor de sus padres. Es el arquero temerario de Chacarita que se animaba hasta a salir jugando del área con la pelota. Es el adolescente del Copello que bailaba como Jagger en los recreos. Es el rockero frustrado que nunca pudo ser. Es el economista que luego se convirtió en profesor. Es el intelectual que plagia y roba trabajos de otros autores. Es la estrella mediática que hizo estragos en el rating. Es el que llevó a la televisión con el apoyo de su multimillonario jefe. Es el que se hizo una fama tal que lo llevó a liderar un partido que lo quiere de presidente. Es el que odia a la casta pero hace arreglos con la casta. Es el que se llama libertario. Es el que le abre la puerta a apologistas de la última dictadura. Es el fondo de pantalla de teléfono de centenares de jóvenes. Es el que quita el sueño al PRO y al kirchnerismo. Es quien nunca supo tener diálogos reales con los que lo rodean. Y por eso es alguien al que siempre le costó tener amigos y pareja. Es un hombre solo y sin hijos. Es el padre dolido de Conan que lo extraña tanto que lo mandó a clonar. Es el confidente de la medium Melamed que le enseñó a hacer telepatía con los clones y con su perro muerto. Es el que habla con el número UNO (dios). Es el que está embarcado en una misión divina. Milei tiene decenas de rostros”
Pero bueno vamos arriba. Modifiquemos la onda. Con el calor cultural de la patria peronista. Que tiene sus errores como todos. Mejor citemos al oráculo que vino desde el futuro y que no lo quisimos escuchar o sí, que el milagro de internet lo mantiene vivo el gran Carlos Busqued.
ç
Qué genio. Dios mío. Por qué ésta gente nos abandona físicamente tan rápido.
Fin del debate 23:32. Domingo 12 de noviembre.
Vi a un hombre contra un niño. Alguien que hablaba seguro con un yo firme y a otro que necesitaba siempre un nosotros para hablar de él, no hablo acá de ese nosotros como forma empática hacia un grupo, noté ese nosotros como que le tuviera que dar explicaciones o recibir órdenes de un jefe. Un presidente tiene que escuchar a su grupo de ministros pero las decisiones las tiene que tomar él. Se paga muy caro esa falta de poder, ya la vivimos con Alberto. Vi un adulto contra un precoz. Eso vi. Es mi sensación. Un padre contra un hijo. Experiencia contra la inmadurez. Eso vi. Pero más allá de mí hay un mundo y uno solo puede convivir con sus sensaciones que pueden ser erradas, meadas fuera del tarro de la realidad.
No puedo confiar ni en mis sensaciones en este mundo infantil recortado en memes y posverdad. Puede pasar cualquier cosa de acá al domingo.
Quiero de la adultez de la noche escribir que ahora se expande universal entre las estrellas. Vuelvo a la madurez de mi casa contrarrestando dialécticamente mis pasos rebeldes por la peatonal desde el trabajo. Me estoy poniendo viejo. No sé por qué me pintó ésta, que es en sí, ahora me doy cuenta, demasiado infantil, a la rebeldía me refiero.
Bueno basta necesito dormir y descansar. Creo que hasta acá estuvo bien. Vamos ? el próximo domingo con ovarios y huevos y felices a votar eligiendo democráticamente más igualdad para todos y todas, Sergio Tomás Massa presidente.
Nos vimos el próximo miércoles.
*definición del propio Domingo Felipe Cavallo sobre que te jedi.